Información Oporto – Póvoa de Varzim
En esta primera etapa del Camino Portugués por la Costa confluyen dos tipos de peregrinos:
Aquellos que hayan decidido realizar el Camino Portugués por la Costa y que, por tanto, comienzan su andadura en Oporto y aquellos que ya llevan algunos kilómetros acumulados y que, tras realizar parte del Camino Portugués (central), han decidido desviarse en Oporto, para seguir el trazado del Camino Portugués por la Costa. A todos, bienvenidos y gracias por compartir esta experiencia con nosotros.
¡Comencemos el Camino Portugués por la Costa!
La primera etapa del Camino Portugués por la Costa se inicia planteándonos una disyuntiva: seguir la orilla del río Duero y recorrer las playas del litoral de Matosinhos o bien, optar por el trazado interior, conocido por trazado histórico, que se dirige a Padrão da Légua, por el que no veremos en ningún momento.
La mayoría de los peregrinos lo tienen claro, si eligen la ruta por la costa es porque quieren caminar cerca del mar y la mayoría de ellos opta por tomar el metro desde Oporto hasta Matosinhos y así evitar la tediosa salida de Oporto.
En esta guía la ruta que seguiremos será esa, porque es más bonita, porque tiene menos opciones de pérdida y porque el Camino por la Costa, nos pide mar. Si deseas información sobre el trazado oficial, puedes consultar nuestro apartado de “Observaciones” donde encontrarás una breve descripción del itinerario histórico.
Siguiendo la ruta del litoral, durante la etapa de hoy pasaremos por lugares como Castro de São Paio, donde encontraremos las ruinas de un poblado de la Edad Hierro, la Reserva Ornitológica de Mindelo o la iglesia de Santa María de Azurara. También por Vila do Conde, una ciudad con gran interés cultural, tanto por su iglesia matriz, como por su acueducto y por la fortaleza de San Juan. La jornada finaliza en Póvoa de Varzim, famosa por su arenales y gastronomía.
El recorrido entre estos lugares lo realizaremos entre atractivas playas del litoral atlántico, avanzando por pasarelas de maderas sobre las dunas.
Itinerario Oporto - Póvoa de Varzim
La primera etapa del Camino Portugués por la Costa no implica gran dificultad, ya que transcurre en todo momento junto a la costa. Si se hace muy larga, el peregrino encontrará a su paso diversas localidades donde podrá partir la etapa en dos.
Oporto/Matosinhos (Km. 0). Inicio de etapa
Consejos prácticos para este tramo: Oporto es una ciudad llena de vida que merece un día de visita. Te recomendamos que llegues a la ciudad uno o dos día antes de iniciar tu andadura, así tendrás oportunidad de visitar los números rincones que Oporto tiene que ofrecerte.
Para consultar detalles sobre los lugares de interés en la ciudad de Oporto puedes consultar la sección “Qué ver y hacer” de la etapa 16 de nuestra guía del Camino Portugués. ¡Buen Camino!
Nosotros elegimos iniciar el Camino Portugués por la Costa desde Matosinhos, para evitar la salida de Oporto. Para ello, nos dirigimos a la línea azul del metro y lo tomamos hasta la para “Mercado” de Matosinhos. Así, comenzaremos a andar directamente frente las bonitas playas de la costa de Portugal.
Tú si quieres puedes hacer lo mismo o salir a pie desde la ciudad en dirección a la desembocadura del Duero.
Nos bajamos del metro y cruzamos el puente levadizo, Ponte Móvel, sobre el puerto de Leixões, donde desemboca el río Leça. Tanto en las escaleras como en el propio puente encontraremos flechas amarillas que nos confirman que estamos en el camino adecuado.
Después de atravesar el puente nos adentramos en Leça da Palmeira, un barrio del municipio de Matosinhos. Giramos a la izquierda por Rua Hintze Ribeiro y la seguimos hasta el final (km. 1,3).
Continuamos por avenida Libertade, que se corresponde con el paseo marítimo, pasando junto a la piscina das Mareas, que se llena con agua de mar. Obra del arquitecto portugués Álvaro Siza Vieira. La ruta continua por el paseo hasta el faro da Boa Nova (km. 3,1), el segundo faro más alto de Portugal.
Pocos metros después pasamos junto a otra obra de Álvaro Siza Vieira, el restaurante, declarado Monumento Nacional, Casa de Chá da Boa Nova, con un pequeño mirador y una capilla. Junto a ella podemos visitar el Faro Boa Nova.
A partir de aquí, la senda continua por diversos tramos por pasarelas de madera que atraviesan las dunas de diversas playas. Los ciclistas deberán seguir el paseo marítimo en este tramo y, aquellos peregrinos de a pie que así lo deseen, también pueden tomar esta opción.
Ya sea por las pasarelas de madera o por el paseo marítimo, superamos unas instalaciones de una refinería de petróleo, cuya presencia estropean el paisaje, y llegamos a Aldeia Nova.
Aldeia Nova (Km. 5,3).
Consejos prácticos para este tramo: En los tramos que discurren por pasarelas han marcado el camino de forma discreta, substituyendo una de las tablillas de madera por otra de plástico de color amarillo o azul, en las que se pueden leer el texto "buen camino" en diversos idiomas. ¡Buen Camino!
A la altura del campo de fútbol de Aldeia Nova nace un carril bici, para los ciclistas. Los peregrinos de a pie podrán continuar por las pasarelas, aunque durante algunos metros tendrán que regresar al paseo de la playa do Paraíso.
Casi dos kilómetros después, pasamos junto al Obelisco da Memória (km. 7). El monumento rinde homenaje al lugar donde desembarcaron las tropas del ejército liberal para acabar con el régimen absolutista de Miguel I de Bragança, en el año 1832.
Seguimos avanzando a lo largo de las playas de Quebrada, Agudela y Pedras do Corgo, y finalmente llegamos a la localidad de Praia de Angeiras (km. 11,5). Vamos hasta el final del paseo marítimo de la localidad, donde nos espera otra pasarela que nos conduce a un bonito puente de madera sobre la desembocadura del Onda.
En este punto abandonamos la freguesia de Lavra, a la que pertenece la localidad que acabamos de atravesar, y nos adentramos en la de Labruge, del concelho de Vila do Conde. Siguiendo el litoral, sin posibilidad a pérdida, llegamos a la localidad de Labruge (km. 13,2).
Labruge (Km. 13,2).
Consejos prácticos para este tramo: La pequeña localidad de Labruge es una excelente opción para aquellos que deseen partir esta etapa en dos. En ella encontrarán los servicios básicos. ¡Buen Camino!
En Labruge podemos desviarnos a visitar la tranquila localidad o sencillamente continuar nuestro recorrido por las pasarelas de maderas. Por éstas, llegamos a la playa de São Paio, donde se ubica un castro de la Edad de Hierro. En la localidad también podemos visitar la iglesia matriz.
Poco después llegamos al pequeño poblado de pescadores de Vila Chã (km. 17,7), salpicado de colores. El tramo de litoral que estamos recorriendo era conocido como la Costa Negra hasta mediados del siglo XX por ser la más peligrosa del país para navegar. Es por ello que, a lo largo del recorrido, podemos encontrar numerosas placas conmemorativas de tragedias de naufragios.
Atravesamos la pequeña villa y, por la avenida Marginal, nos adentramos en el barrio de Louçá. Alternando tramos que discurren entre barrios de casas y bloques de viviendas, con tramos por pasarelas de madera, llegamos a la playa de Mindelo.
Aquí las pasarelas nos llevan a la parte trasera de la dunas y seguimos de frente, bordeando la hermosa Reserva Ornitológica de Mindelo, que a lo largo del año alberga más de 150 especies de aves.
Mindelo (Km. 18,7).
Consejos prácticos para este tramo: En Azurara el recorrido por el litoral confluye con el trazado histórico. ¡Buen Camino!
Después de atravesar los apartamentos de la playa de Árvore, regresamos a las pasarelas. Continuamos por la playa en paralelo a la la valla del camping de la localidad y al final nos desviamos hacia el interior, pasando junto a unos apartamentos donde se sitúa la Azurara Surf School.
Doblamos a la izquierda por una acera amarilla, junto a un carril con listones de madera, hasta que una flecha del Camino de Santiago nos obliga a desviarnos a la derecha por una pista de adoquines.
A nuestro paso sale un pequeño puente que nos ayuda a salvar la ría y luego tomamos la Rua Francisco Gonçalves Monteiró a mano izquierda, para desembocar en Rua da Junqueira, una pequeña carretera que nos conduce a Azurara.
Al llegar a la carretera N13 doblamos a la izquierda y, por la acera, cruzamos sobre el río Ave. Al otro lado se alza el enorme convento de Santa Clara, que nos da la bienvenida a Vila do Conde. Tras cruzar el puente, debemos estar atentos, pues la senda jacobea se desvía a mano izquierda, en paralelo al curso del río, hasta llegar a la Praça da República.
Desde la plaza, las flechas amarillas nos dirigen al casco histórico de Vila do Conde, siguiendo por Rua do Lidador hasta los Paços do Concelho y la iglesia matriz.
Vila do Conde (Km. 27,3).
Consejos prácticos para este tramo: A partir de Vila do Conde hay que tener cuidado a la hora de seguir las flechas porque algunas marcan hacia São Pedro de Rates, localidad del Camino Portugués Central. ¡Buen Camino!
En subida, por la estrecha Rua da Igreja, seguimos hasta la Rua da Costa, que tomamos a mano derecha. Continuamos por Rua dos Benguiados, que nos conduce a una rotonda en la que encontramos un estanque y una escultura con dos figuras de bronce en dos pirámides puntiagudas.
Seguimos recto, por Rua dos Benguiados, y continuamos por Rua da Estrada Velha y Rua das Violetas, pasando junto al camposanto das Caxinhas. Por Rua dos Ferreiros nos adentramos en el municipio de Póvoa de Varzim. Continuamos de frente hasta Praça do Almada, situada en el centro de la villa.
Póvoa de Varzim (Km. 30,6). Final de etapa
Consejos prácticos para este tramo: Póvoa de Varzim es una localidad con bastante vida y bastante turismo. Si estás realizando el Camino Portugués por la Costa en verano, seguro que no te aburrirás. ¡Hasta mañana!
En el centro de la villa, encontramos el ayuntamiento, un pelourinho, un mercado y diversas calles comerciales, entre las que destaca Rua da Junqueira. También podemos visitar la iglesia matriz, la fortaleza de Nossa Senhora da Conceição y el Solar dos Carneiros, donde se ubica el Museo Municipal de Etnografía e Historia.
Si la temperatura es agradable, también es una buena idea pasar la tarde en la playa de Póvoa de Varzim, muy concurrida durante las tardes de verano.
Observaciones Oporto - Póvoa de Varzim
A continuación te explicamos cómo llegar a Oporto, así como algunas recomendaciones sobre la etapa de hoy y su gastronomía.
Cómo llegar a Oporto
A la ciudad llegan carreteras principales como la A-1, la A-3, la A-28, la A-4 o la A-41 por tanto, llegar a la ciudad desde cualquier punto de Portugal o desde la frontera gallega, ya sea en vehículo privado o en bus, es relativamente sencillo.
Si queremos llegar a Oporto en tren, desde España, la mejor opción es desde Vigo, tarda apenas dos horas y hay varias líneas diarias. Desde cualquier otro punto del país las líneas se dirigen a Lisboa y luego hay que tomar otro a Oporto. En autobús existen varias líneas regulares desde varios puntos de España.
Oporto cuenta con un aeropuerto, situado a 12 kilómetros de la ciudad, con vuelos diarios a España y a las principales ciudades europeas. Otra opción es volar a Lisboa, que cuenta con un aeropuerto mayor, y desde allí enlazar con Oporto.
Precauciones etapa Oporto - Póvoa de Varzim
La etapa de hoy es de alto kilometraje, si se comienza a andar desde Oporto y aquellos que vienen del Camino Portugués Central quizás no encuentren problemas en completarla. Sin embargo, aquellos que comienzan su andadura en Oporto y que no se encuentran en buena forma física, quizás les pueda resultar algo dura para la primera jornada. Nosotros recomendamos tomar el metro desde Oporto hasta Matosinhos y evitar así casi algo más de 11 kilómetros de aburrido recorrido.
No obstante antes de decidir si tomarás el metro o no, debes plantearte qué trazado seguirás hasta Póvoa de Varzim, ya que para salir de Oporto hay dos itinerarios: el trazado histórico y la ruta que discurre por el litoral. El trazado histórico es mucho menos bonito y en su recorrido no se acerca al mar. Por el contrario el trazado que sigue por el litoral es mucho más agradable. Ambos tienen un kilometraje similar. Es elección de cada uno.
Para tomar el trazado que va por la costa, sin tomar el metro, es importante no confundirse con las flechas amarillas que encontraremos a primera hora de la mañana, ya que éstas apuntan al trazado histórico. Debemos ignorarlas y seguir por libre hasta la ribera del río Duero. Una vez allí es imposible perderse.
El trazado histórico trata de seguir el recorrido de Vía Veteres, que unía Porto y Vila do Conde, en la época romana, por ello es considerada la ruta histórica. Sin embargo, en la actualidad, es la senda menos usada, uno por carecer de atractivos, y dos, por no encontrarse bien señalizada.
Aquellos que decidan seguir este trazado deben utilizar la misma ruta de salida que el Camino Portugués Central (puedes consultar la etapa 16 de nuestra guía del Camino Portugués para ver más detalle) durante los primeros 6,5 kilómetros, hasta la bifurcación en el Padrão da Légua, donde se sitúa un cruceiro.
En dicho punto se debe poner mucha atención porque hasta hace poco, la señalización del desvío del Camino Portugués por la Costa, no era muy clara. En ese punto se debe girar a la izquierda por la Rua do Senhor y seguir de frente por Rua da Fonte Velha y Rua da Cal, hasta el puente de D. Goimil (km. 9,4), sobre el río Leça.
Después tomamos la Rua das Carvalhas y la Rua da Estrada, por un entorno mixto, salpicado de naves industriales y casas residenciales. Cruzamos la avenida do Aeroporto (km. 12,6) y a 200 metros de la parada de metro Botica, seguimos de frente por la Rua da Botica, atravesando el barrio de Pedras Rubras y pasando junto a la valla de la pista del aeropuerto y el estado de fútbol de Pedras Rubras (km. 16,4).
Seguimos el trayecto, pasando cerca de diversas paradas de la línea de metro B-Roja: Vilar do Pinheiro, Modivas Sul y Centro, Mindelo, etc. La ruta atraviesa Avelada y prosigue por la Rua da Venda Velha, en dirección norte. Tras el paso subterráneo de la autopista A28, dejamos a mano izquierda, a unos 100 metros, la torre de la iglesia de Labruge (km. 19,1).
Quienes deseen pernoctar en ella y continuar al día siguiente por la ruta del litoral, aún tendrán que caminar 1,7 kilómetros al oeste. Los que deseen continuar por el trazado histórico, deberán seguir por Rua dos Marcos, Rua do Fojo y Rua dos Combatentes, sobre un pavimento de adoquines.
Pasamos junto a un área de servicio de la autopista A28 y después, junto a un gran centro comercial (km 21,2). A la altura de la escuela de Mindelo nos desviamos a la derecha, pasando frente a su iglesia parroquial.
Cruzamos las localidades de Areia y Azurara, y finalmente llegamos al puente sobre el río Ave (km 27,6). Atravesamos el puente y nos adentramos en el centro de Vila do Conde, donde el trazado histórico se une a la ruta del litoral.
Los ciclistas que decidan tomar la ruta del litoral deben saber que gran parte del recorrido discurre por pasarelas de madera sobre la arena en las que no se permite el uso de bicicletas para evitar incidentes con los peatones. Éstos podrán seguir la senda jacobea por el paseo marítimo o por el carril bici que encontrarán en muchos tramos del recorrido.
La ruta del litoral discurre constantemente junto al mar, por tanto, el calor no será un gran problema, ya que en cualquier punto de la ruta los peregrinos podrá aprovechar para darse un baño.
Muchas de las personas que siguen esta ruta, prefieren abandonar la pasarela de madera y caminar directamente sobre la arena, deben saber que aunque la sensación sea muy agradable, tanto para nuestros pies, como para nuestra mente, caminar sobre la arena resulta mucho más agotador. Lo mejor es ir alternando entre arena y pasarela.
Gastronomía etapa Oporto - Póvoa de Varzim
A continuación, te sugerimos algunos platos que podrás degustar en la primera etapa del Camino Portugués por la Costa.
La noche anterior a iniciar tu peregrinación, si pernoctas en Oporto puedes aprovechar para degustar algunos platos típicos en la ciudad. Algunos son:
- Linguiça (paletilla de cerdo adobada)
- Tripas a la portuense
- Pulpo
- Bacalao à Gómez de Sá. SI bien el bacalao es famoso en todo el país, merece la pena probar el estilo de preparación del norte.
- Francesinha, un contundente sándwich elaborado con diferentes carnes, queso y salsa molho.
- Vino de Porto, que cuenta con denominación de origen propia.
Durante tu recorrido por el litoral podrás degustar pescado asado, recién sacado del mar. Es común encontrar chiringuitos y restaurantes a pie de playa que lo preparan en parrillas, situadas frecuentemente en plena calle.
No obstante, durante el recorrido podrás disfrutar tanto del pescado como de la agricultura y la carne, ya que los platos tradicionales de la zona, presentan una fuerte combinación entre estos ingredientes. Algunas de nuestras recomendaciones son:
- Arroz de sardinhas
- Pescada à Poveira
- Caldeirada de peixe
- Cabrito asado
- “Espadín á moda das Caxinas”
- Dulces de huevos
- “Rosca de folar de Páscoa”
- Rabanadas Poveiras, una dulce tentación a la que sin duda sucumbirán
Qué ver y qué hacer Oporto - Póvoa de Varzim
Al principio de esta guía te contamos que durante tu peregrinación por el Camino Portugués de la Costa, no debes perder la oportunidad de visitar la ciudad de los puentes, Oporto. En el apartado “Qué ver y hacer” de la etapa 16 de nuestra guía del Camino Portugués podrás encontrar información sobre los lugares que puedes visitar.
A continuación, te damos detalles sobre los lugares de interés que encontrarás durante la primera etapa del Camino Portugués por la Costa, siguiendo el trazado del litoral.
Matosinhos
Matosinhos es un pequeño municipio de 62 kilómetros cuadrados, que cuenta con unos 175.000 habitantes. Aunque es un municipio independiente del de Oporto, forma parte del área conocida como el Grande Porto. Esto se debe a que ambos municipios están muy bien conectados y a que mucha de la población que estudia y trabaja en Oporto, vive en Matosinhos.
Matosinhos cuenta con lindas playas en la que es común la práctica de windsurf y bodyboard. El municipio, además acoge el Puerto de Leixões, el segundo puerto mercante más grande del país luso, así como un importante puerto sardinero y embarcadero deportivo.
En Matosinhos se pueden visitar dos esculturas que marcan singularmente la ciudad. Una es la escultura situada en la plaza de S. Salvador, en una rotonda. La obra representa a los pescadores de la localidad y es conocida como la Anémona. Aunque el nombre que le asignó su autora, la escultura norteamericana Janet Echelman, es She Changes.
La otra escultura, obra de José João Brito, rinde homenaje a las familias y víctimas del naufragio del que fueron víctimas muchos de sus habitantes el 1 de diciembre de 1947, cuando más de 152 pescadores murieron en alta mar, tras el naufragio de cuatro traineras.
La escultura se creó en el año 2005 y está formada por cinco figuras de cuerpo entero, que representan a las viudas y huérfanos de la tragedia, expresando el dolor por la pérdida de sus seres amados.
En el municipio también se puede visitar la iglesia do Bom Jesús.
Iglesia do Bom Jesús
La iglesia do Bom Jesús se sitúa en la localidad Matosinhos. Se trata de una importante edificación religiosa del siglo XVI, de traza renacentista. Desde su construcción, el templo ha sido objeto de diversas alteraciones, las más significativas son las realizadas en el siglo XVIII, por Luís Pereira da Costa, famoso ebanista que añadió la capilla mayor, y las realizadas por de Nicolau Nasoni.
Del exterior de la iglesia destaca la combinación de volúmenes y detalles, que dotan a la fachada principal de un aspecto escenográfico. La fachada, diseñada por Nicolau Nasoni, resalta por su horizontalidad y sus características barrocas.
También llaman la atención las dos torres del campanario y la puerta principal decorada con un medallón con una vieira. A los laterales se puede apreciar las esculturas de San Pedro y San Paulo.
El interior está formado por tres naves y cuenta con un imponente altar mayor, de talla dorada, que integra la imagen de Cristo crucificado, del siglo XII. La escultura realizada en madera hueca cuenta con dos metros de altura y resalta la asimetría de su cara, ya que el ojo izquierdo mira al cielo y el derecho a la Tierra, representando la unión entre Dios y el Hombre.
Ponte Móvel
El Ponte Móvel se sitúa en el puerto de Leixões y conecta Matosinhos y Leça da Palmeira. Su estructura movediza, operada por un moderno sistema hidráulico de apertura y cierre, permite que los grandes buques pueden navegar a través de ella.
El puente es obra del arquitecto João Motta Guedes y se inauguró en el año 2007. El puente cuenta con 42 metros de altura, en la actualidad. Con el fin de no tener que abrir y cerrar el puente tan frecuentemente, posteriormente se realizó una reforma de su estructura ampliando su vano.
Se trata del cuarto puente más grande del mundo, detrás del puente móvil de Barcelona,
Leça da Palmeira
Leça da Palmeira es una localidad el concelho de Matosihos, que cuenta con una población de 18.000 habitantes. En los últimos años se ha hecho muy popular en el municipio y hoy es una de las ciudades más pobladas de Matosinhos.
En la localidad se puede visitar el Fuerte Nuestra Señora de las Nieves, la Casa de Chá, el faro da Boa Noa, las Piscinas des Mares, la Quinta de Santiago y la Quinta de la Concepción.
Fuerte de Nuestra Señora de las Nieves
El Fuerte de Nuestra Señora de las Nieves, también conocido como Fort Leça da Palmeira o castillo de Matosinhos, se sitúa en Leça da Palmeira. Se trata de una fortificación marítima con baluartes y planta estrellada de cuatro puntas, con garitas y cúpulas en sus vértices.
Las obras de construcción se iniciaron en el año 1638, por determinación de João Rodrigues Sá y Menezes, primer Conde de Penaguião, aunque se cree que las obras no concluyeron hasta el año 1720. No obstante, la construcción fue declarada Propiedad de Interés Público, en el año 1961.
Durante las Guerras Liberales, en el año 1832, el fuerte fue objeto de algunas mejoras en los almacenes, el puente levadizo, la escalera del foso y parapetos, conservando, aún, algunos cañones.
Piscinas des Mares
Las piscinas de marea de Leça da Palmeira se sitúan en la playa de la localidad. Su construcción se realizó en el año 1960, aunque no se inauguraron hasta el año 1966. El espacio fue diseñado por el arquitecto Álvaro Siza Vieira y presenta un estilo fundamentalmente modernista.
Las piscinas cuentan con 25 metros de largo y ha sido catalogadas como Monumento Nacional.
Quinta da Conceiçao
La Quinta de la Concepción se sitúa en Leça da Palmeira. En el año 1418, el convento acogió a la Orden de San Francisco, pero décadas después éstos abandonaron el lugar debido a las condiciones agrestes del entorno.
Durante más de tres siglos, la quinta permaneció abandonada. En el año 1956, la propiedad fue alquilada por la Comisión de Turismo del Ayuntamiento de Matosinhos con el objetivo de crear en ella el Parque de la Villa. Con este fin, la quinta sufrió diversas modificaciones, durante la década de los 60, diseñadas por el arquitecto Fernando Távora.
En el año 2008, la Quinta da Conceição fue concedida a una propiedad privada, pero sin perder su catalogación de parque público. En la actualidad aún se puede apreciar el antiguo claustro, un portal de estilo manuelino y la capilla de San Francisco, donde se sitúa el sepulcro del fray João da Póvoa.
Quinta de Santiago
La Quinta de Santiago se sitúa en Leça da Palmeira. El inmueble se levantó en el siglo XIX y es obra del arquitecto veneciano, Nicola Bigaglia. La función de la construcción era servir de segunda residencia de João Santiago de Carvalho, aunque a su dueño le gustaba tanto la casa, que acabó convirtiéndola en su residencia permanente.
El edificio recuerda a un castillo, pero con un toque más moderno. La construcción reúne varios estilo arquitectónicos: neo-manuelino, neo-barroco, neo-clásico, neo-medieval y romántico.
En la entrada domina el estilo neo-medieval por su colorida vidriera, los emblemas bajo el relieve de las paredes y por su simbología, como por ejemplo, la imagen de un caballero pintado sobre una de sus puertas.
En el año 1968 el inmueble fue adquirido por el Ayuntamiento de Matasinhos, quien realizó obras de restauración y conservación, a cargo del arquitecto Fernando Távora. En el año 1996 fue recalificado con espacio museístico.
En la actualidad, la Quinta de Santiago está formada por tres edificios. El museo, formado por dos plantas donde se exponen colecciones de historia y arte. El espacio Irene Vilar, un auditorio y servicios educativos, y la Casa del Bosque, donde se ubica una cascada gigante, con casi 15 metros. En los alrededores de la quinta se pueden encontrar esculturas de autores como Lagoa Henriques, Rui Anahory u Siza Vieira.
Casa de Chá
La Casa de Chá se encuentra en la zona de Bona Nova, junto al faro de Leça da Palmeira. La conocida casa de té y restaurante está instalada en el primer edificio proyectado por el arquitecto Álvaro Siza Vieira.
El edificio fue concebido a raíz de un concurso realizado por el Ayuntamiento de Matosinhos en el año 1956, del que salió vencedor el arquitecto Fernando Távora. Después de elegir el lugar donde se debía ubicar la construcción, en las rocas de Boa Nova, Távora delegó el proyecto a uno de sus colabores, Álvaro Siza, que, en aquel momento, estaba dando sus primeros pasos como arquitecto.
En sus orígenes, el espacio funcionó sólo como casa de té, pero actualmente cuenta con tres espacios, una zona donde tomar té o café mirando al océano, un bar y un restaurante. Hoy en día, la Casa de Chá, construida sobre las rocas, a dos metros del agua, es uno de los sitios más buscados por los amantes de la arquitectura, por los amantes de una buena comida y por los amantes el mar.
Faro de Boa Nova
El faro de Boa Nova, se sitúa en Leça da Palmeira, en la zona de Bona Nova. La construcción se realizó en el año 1926, aunque no se inauguró hasta 1927. Su estructura presenta forma de torre cónica y está realizada en cemento armado. El faro se sitúa a 57 metros sobre el nivel del mar y cuenta con una altitud de 46 metros.
Desde el año 1979, el faro funciona de manera automatizada. Su señal luminosa se distingue de todos los demás por producir tres destellos luminosos cada 14 segundos.
Anexo al faro se sitúa un pequeño museo con una exposición de piezas y mecanismos relacionados con el funcionamiento de los faros. En el exterior del recinto aún se conserva la columna y linterna del antiguo Faro de las Sobreeras.
Praia de Angeiras
La Praia de Angeiras están inmersa en un extenso arenal, rodeada de dunas que le confieren un aspecto salvaje. Dada la proximidad a la localidad, la playa cuenta con una completa infraestructura y en ella se practican diversos deportes acuáticos.
Labruge
Labruge es una parroquia de Vila do Conde, que cuenta con una superficie de cinco kilómetros cuadrados y una población de 806 habitantes.
El pueblo cuenta con un pintoresco ambiente, situado junto a una playa, delimitada por dunas y salpicada por rocas, y rodeado por campos agrícolas. En la localidad se puede visitar el Castro de São Paio, un poblado celta que data de la Edad del Hierro, entorno al siglo V a. C., y que siguió habitado durante la dominación romana; así como la iglesia matriz, de mitad del siglo XVIII.
Vila de Chã
Vila Chã es una freguesia del concelho de Vila do Conde, que cuenta con un área de 10 kilómetros cuadrados repleta de pinares y eucaliptos. La localidad es conocida, entre los marineros de Portugal, por ser uno de los pocos lugares donde las mujeres tenían la carta de arrais y colaboraban, cuando era necesario, en los trabajos de la mar junto a sus maridos y hermanos.
Frente a la costa de Vila de Chã se sitúa la Aguilhada, un canal donde los barcos españoles se resguardaban antes de atacar a los navíos ingleses. Tras la alianza de España con Francia, Portugal se vio en un conflicto para mantener su neutralidad.
En el año 1976, Juan VI encargó la construcción de un fuerte junto al canal de la Aguilhada, a fin de prevenir incidentes que pudiesen poner en riesgo la neutralidad del país. Éste se construyó provisionalmente sobre la arena. A su lado, se construyó otro fuerte y una casita que servía de polvorín.
Tras la Guerra Peninsular, el fuerte cayó en olvido, aunque continúo provisto de armamento. Finalmente, en 1861 fue declarado en ruinas. Actualmente aún se pueden observar restos de su estructura.
Reserva Ornitológica de Mindelo
La reserva ornitológica de Mindelo se sitúa entre Mindelo y el Rio Ave, en el municipio de Vila do Conde. La reserva se constituyó en el año 1975 y fue la primera área protegida que se creó en el país luso. Tras su creación, la reserva sirvió de base a numerosos estudios científicos.
En la Reserva se han observado más de 150 especies de aves: tórtolas, garzas, águilas, pollas de agua, patos, cucos, corujas, ruiseñores y tordos, etc.. Así como la presencia de 14 especies de anfibios, como el tritón palmado, el sapo de verrugas verdes, el sapo de uña negra y la salamandra; y diversas especies de mamíferos y reptiles. Muchas de estas especies y sus hábitats se encuentran amenazados.
Praia da Árvore
La playa de Árvore se sitúa entre las playas de Azurara y de Mindelo. Situada en medio de un amplio arenal, la playa está delimitada por una franja de dunas de un kilómetro de longitud, inserta en la Reserva Ornitológica de Mindelo.
Iglesia de Santa María de Azurara
La iglesia de Santa María se sitúa en la villa de Azurara. El templo data del siglo XVI y es de estilo renacentista.
Su estructura está formada por tres naves de diferentes alturas. Destaca la portada y el cruceiro, del siglo XVI, de estilo manuelino. En su interior, sobresale la bóveda artesonada del ábside y su ornamentación con motivos vinculados a la navegación.
Vila do Conde
Vila do Conde es un municipio, del distrito de Oporto, de casi 150 kilómetros cuadrados y en cuya capital residen 30.000 personas. La villa está dominada por el enorme edificio del convento de Santa Clara y por un larguísimo acueducto.
En el casco antiguo podemos visitar la iglesia de São João Baptista, con su portada de estilo manuelino, los Paços do Conselho (palacio del Ayuntamiento) y la iglesia matriz.
Paços de Concelho
Los Paços de Concelho se sitúan en Vila do Conde y datan del siglo XVI. La edificación cuenta con una hermosa fachada y una escalera exterior. Sobre la puerta principal se proyecta un frontón, que luce las armas del rey D. Manuel, el Afortunado.
Su infraestructura interior fue totalmente remodelada y ampliada en el año 2002 y actualmente no es visitable.
Iglesia de São João Baptista
La iglesia de São João Baptista si sitúa en la localidad de Vila do Conde y es de estilo gótico, aunque presenta elementos de estilo manuelino, plateresco y barroco. El templo está formado por tres naves y su construcción se concluyó gracias al impulso del rey D. Manuel I de Portugal, conocido como el Afortunado, quien visitó la ciudad en su peregrinación a Santiago de Compostela en el año 1502.
Convento de Santa Clara
El convento de Santa Clara se alza sobre un pequeño monte, junto a la ciudad de Vila do Conde, dominando completamente la localidad. El monasterio se construyó en el año 1319 y se relaciona con el nacimiento de la propia localidad.
En el año 1834, después del decreto de extinción de las órdenes religiosas, la vida conventual se fue apagando lentamente, hasta que en el año 1890, murió la última monja. Tras eso, la construcción tuvo diversos usos, hasta finalmente, albergar servicios municipales, a partir del año 2015.
En la actualidad, se conserva una interesante iglesia, del siglo XIV, y el claustro, ambos de estilo gótico. En la iglesia se pueden visitar algunas tumbas importantes, como por ejemplo, la de Beatriz de Portugal.
El convento dio origen a dos famosas leyendas: la leyenda de la Abadesa Berengaria y la leyenda de la Niña del Merendeiro.
La primera de ellas hace referencia a un figura histórica, la Abadessa Berengaria, quien estuvo al frente del convento entre los años 1384 y 1406. Según cuenta esta leyenda, hubo una época en la que la vida religiosa de las monjas estaba muy relajada, rechazando trabajos y no cumpliendo con la disciplina de sus rezos.
Entre las monjas que habitaban en el convento en aquella época, había una excepción, la hermana Berengaria, quien era cumplidora, humilde y seguía el patrón de conducta de sus predecesoras. Cuando la abadesa que manejaba el convento en esa época falleció, hubo que elegir una sucesora.
Al cargo se presentaron muchas monjas, sin embargo sus compañeras recelosas de que ninguna se quedase con el cargo, decidieron dar su voto a Berengaria, tratando así de aplazar la adjudicación, ya que consideraban que ésta era totalmente incapaz de desarrollar las funciones propias del puesto.
No obstante, cuando la hermana Berengaria, todo y no haberse presentado, comprobó que había sido elegida según las reglas, decidió aceptar el cargo. El resto de monjas se burlaban de ella y se negaban a obedecer su ordenes, afirmando que la votación había sido solo una burla.
Ante esta rebeldía de sus compañeras, la nueva abadesa pidió a sus predecesoras, que yacían sepultadas en el convento, que le rindiesen homenaje de obediencia. Fue en ese momento que las antiguas abadesas, se levantaron de sus sepulturas y mostraron una actitud sumisa con ella. Ante esto el resto de monjas se arrepintieron de su soberbia y acataron, con gusto, la autoridad de la Abadesa Berengaria.
Iglesia Matriz de Vila do Conde
La iglesia matriz de Vila do Conde es un templo de principios del siglo XVI. Destaca por su notable decoración manuelina.
A lo largo de la historia ha sufrido diversas reformas en las que se han añadido elementos, entre ellos la torre campanario, en el siglo XVII. El interior está formado por tres naves, divididas por columnas, y un ábside.
Acueducto de Vila do Conde
El acueducto de Vila do Conde también recibe el nombre de acueducto de Santa Clara. La construcción se extiende entre el Convento de Santa Clara, en Vila do Conde, y Terroso, en Póvoa de Varzim.
La construcción se realizó en el siglo XVIII con el objetivo de llevar agua desde un manantial de interior al convento. Su arquitectura es de estilo románico y, originariamente, contaba con 999 arcos, de los cuales, a día de hoy solo se conservan cinco. Desde el año 1910, está catalogado como Monumento Nacional.
Póvoa da Varzim
Póvoa da Varzim es un municipio de 82 kilómetros cuadrados. En la capital de municipio residen casi 39.000 habitantes. La zona constituye uno de los principales centros turísticos del norte de Portugal, debido a sus extensos arenales y a que es de las pocas zonas en las que el juego está autorizado.
El municipio está fuertemente asociado a las letras portuguesas. Fue la ciudad que vio nacer a Eça de Queirós y donde José Régio pasaba sus tiempos libres para escribir. Otros escritores relacionados con Póvoa da Varzim son Camilo Castelo Branco, Agustina Bessa-Luís, Almeida Garrett y António Nobre.
En la localidad se puede visitar su iglesia matriz, la fortaleza de Nossa Senhora da Conceição y el Solar dos Carneiros, donde se ubica el Museo Municipal de Etnografía e Historia.
Fortaleza de Nossa Senhora da Conceição
La Fortaleza de Nuestra Señora de la Concepción, tradicionalmente llamada Castillo de Varzim, está situada en la localidad de Póvoa de Varzim. Su construcción se realizó entre los años 1701y 1740, con el objetivo de defender la ciudad de los ataques piratas.
La fortificación presenta una planta cuadrangular y luce cuatro baluartes en los vértices: dos de frente al mar (baluartes de la Concepción y de San Francisco de Borgia) y dos mirando a tierra (baluartes de San José y San Felipe y Diogo).
En el terraplén de la fortificación, fue edificada, en el año 1743, una capilla, en advocación a Nuestra Señora de la Concepción, llamada "Real Capela". En ésta, los jesuitas instituyeron la hermandad del Santísimo Corazón de Jesús, que llegó a contar con más de 2.000 hermanos, entre gentes de Póvoa de Varzim y localidades vecinas.
Museo Municipal de Etnografía e Historia (Solar dos Carneiros)
Museo Municipal de Etnografía e Historia se sitúa en la ciudad de Póvoa de Varzim. El museo se ubica en una antigua casa blasonada, denominada Solar dos Aries, residencia del Visconde de Azevedo.
Se trata de edificio del siglo XVII, que se habilitó como museo en el año 1937, a partir de los museos etnográficos más tempranos en Portugal. En sus instalaciones alberga una colección del museo "poveiras siglas" merecedora del premio "Museo Europeo del Año" en 1980.
Custodia también exposiciones de arte sacro de la primitiva iglesia matriz, del siglo XVI, la colección de fianzas, de los siglos XVI al XIX, y piezas arqueológicas como las inscripciones romanas de Beiriz.
Iglesia Matriz de Póvoa de Varzim
La Iglesia Matriz de la Póvoa de Varzim o Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Concepción es una iglesia de estilo barroco, con valor arquitectónico relevante, ya que la Póvoa de Varzim de esa época una importante comunidad pesquera.
João V, ordenó que una pequeña parte del impuesto municipal se destinase a la construcción de la iglesia, y además los pozos contribuyen con una parte de sus ingresos. La obra fue dirigida por el arquitecto Manuel Fernandes da Silva, hasta su fallecimiento en 1753.
La fachada setecentista está compuesta por líneas generosas de arte barroco y en ella se puede apreciar el escudo real, sobre el cual se abre un nicho que alberga una imagen de la Virgen en piedra. En la celebración de los 250 años de la inauguración de la iglesia, se añadieron las puertas de bronce, del escultor Rui Anahory.
El amplio interior está formado por una sola nave cubierta por una bóveda de cuna. La nave es reforzada por tres robustos arcos. La paredes están ornamentadas con nueve altares del barroco joanino en talla dorada, que acogen esculturas setecentistas. Resaltan sus retablos, especialmente el de la capilla mayor, de estilo rococó, compuesto por seis columnas de capiteles compuestos.
Servicios Oporto - Póvoa de Varzim

Servicios Oporto a Povoa de Varzim
Mapa Oporto - Póvoa de Varzim

Mapa etapa de Oporto a Povoa de Varzim
Perfil Oporto - Póvoa de Varzim

Perfil etapa de Oporto a Povoa de Varzim